Formación para el Empleo

Partiendo de que nuestra finalidad es apoyar el acceso al empleo de los jóvenes, somos conscientes que se verá impulsada si participan en acciones formativas que permitan iniciar y/o consolidar nuevos aprendizajes.
 
 Acceder a este tipo de formaciones requiere realizar un trabajo previo con los jóvenes para dotarles de habilidades sociales y hábitos, a lo que llamamos formación prelaboral. Aunque bien es cierto que suele tratarse de talleres en los que se trabaja casi tanto las actitudes y hábitos como las competencias profesionales. 
 
La formación laboral adopta el formato de curso o taller, con contenidos tantos teóricos cómo prácticos, las cuales cualifican para una determinada ocupación. Se caracterizan por el elevado componente práctico, con el objetivo de captar la atención de los chicos y así evitar una de las causas de su fracaso en el sistema educativo.
 
Tanto la formación impartida como su diseño están íntimamente relacionadas con las particularidades de la población a la que va dirigida, sus carencias y capacidades iniciales. 
Otra modalidad es realizar formación acordada con una empresa, de manera que, si ésta necesita contratar trabajadores para realizar unas tareas, se imparte la formación específica para los puestos que necesita cubrir.